Un café y un pincho de tortilla

El viento abraza tu cura, la sal cicatriza la nariz y no estas en la playa

Las alas tristes son infames, las alas vigorosas planean y planean

Algo bueno diría el vagabundo de barba blanca rota y raída

Algo triste dirían los habitantes de una caja de cerillas y moderna

Mientras, el tiempo se detiene, se alarga, se comprime, se estira y

Nos rodea con el manto del invierno, que quiere ser blanco

Paso tras paso, con la rodilla embalsamada por el frío,  por el descenso de la pendiente, con un andar firme, pero pausado, algo vacilante, como un yonqui en una granja de rehabilitación.